Pasar lista y crear un texto oral

¡Vaya título que lleva esta entrada!, pensaréis. Pero es que eso fue lo hicimos el segundo o tercer día de clase (ya sabéis que en Japón el curso empieza en abril).

Aprenderse el nombre del alumnado es un reto cada vez más difícil de cumplir porque la memoria ya no es lo que era y porque tengo un montón de estudiantes. Para conseguir recordarlos y para comprobar que están, pasamos lista. Pero esta puede ser una actividad muy aburrida, así que hay que echarle imaginación y sacarle algún beneficio para la expresión oral en español. Y como los estudiantes de segundo ya están acostumbrados a “las locuras” de su profe, aceptan con buena disposición lo que les propongo. Este segundo era nuevo para mí, no los había tenido en primero, pero como me había dicho mi compañero, eran muy buenos. Confiada en ello, me lancé.

Objetivos:

• Activar su vocabulario
• Lograr que se escuchen
• Entender el tipo de relación que debía existir entre las palabras
• Crear un texto más allá de la yuxtaposición de oraciones.
• Transmitir la sensación de logro: tú puedes, entre todos podemos.

Procedimiento.

Yo nombraba a un/una estudiante que tenía que decir una palabra, la primera que se le ocurriera. Claro esto habría sido muy fácil. Y no.

El /la siguiente estudiante tenía que decir una palabra relacionada, como en los tests psicológicos. Esto ya tenía más enjundia.

La primea persona dijo: “collar” y la última terminó en “tocar la lotería”.

Hasta aquí podríamos decir que fue un buen ejercicio para activar el vocabulario memorizado.

Pero hubo más: “ahora vamos a hacer un texto oral entre todos usando marcadores discursivos que den coherencia al conjunto” –les dije–. En segundo ya saben bastantes y lo que quería era que los activaran. No tenían que seguir el orden en el que habían salido las palabras, pero tenían que aparecer todas.

La sinergia del grupo y sus ganas lo hicieron todo. Salió un texto coherente, algo loco, pero bien enhebrado. Fue un fallo que no lo grabara. Prometo hacerlo la próxima vez porque vale la pena.

Esta idea se me ocurrió el año pasado a partir de los textos que aparecen el manual para practicar la gramática o el vocabulario. Como salió muy bien las veces que lo hicimos, pensé en probar esta otra posibilidad. Os las recomiendo.